Desde el áspic hasta el velo, de la esferificación a los glaseados, desde las gominolas al falso caviar, de la gelatina rallada al falso bizcocho: controlar los gelificantes y conocer todos sus usos es clave para cualquier profesional de la cocina dulce, salada o líquida.
En nuestra familia de gelificantes se encuentran todos los recursos para obtener infinitas texturas gelatinosas: calientes, frías, flexibles, semilíquidas, rígidas, en frío, tradicionales, modernas, reversibles, irreversibles…